El Servicio Andaluz de Salud ha valorado como un “retroceso en la atención que se presta actualmente” la devolución, para su dispensación en farmacia comunitaria, de los medicamentos de Diagnóstico Hospitalario que la Junta de Andalucía sacó de la farmacia de forma unilateral para llevar su dispensación a los hospitales. En un comunicado, el SAS ha querido recordar a la Confederación Empresarial de Oficinas de Farmacia de Andalucía (CEOFA), que la medida supondrá a los pacientes andaluces “nuevos costes” por los copagos que tendrán que asumir ya que estos tratamientos “dejarían de ser gratuitos, como ocurre en estos momentos”.
La vuelta de estos medicamentos a las farmacias se producirá como consecuencia de la anulación por parte de una sentencia del Tribunal Supremo de la resolución que dictó la salida de las farmacias de un grupo de medicamentos.
Según el SAS, la decisión de realizar la dispensación de determinados medicamentos oncológicos y tratamientos hormonales de la infertilidad en los servicios de farmacia hospitalaria se tomó en base a razones “de índole sanitaria y de mejora de la accesibilidad”. Según ellos, “se trata de fármacos que requieren una particular vigilancia, supervisión y control por parte del equipo médico del hospital en el que es atendido”.
El Servicio Andaluz de Salud argumenta además, que la decisión tomada fue correcta ya que explica que otras comunidades autónomas hicieron lo mismo y que, incluso el Ministerio de Sanidad, posteriormente, también dictó una resolución para incluir un listado de medicamentos como de dispensación hospitalaria a nivel nacional.
Nicolas Gonzalez Casares:
Y yo me pregunto, ¿ qué tienen que ver las razones de índole sanitario con el copago ?
Ellos mismos se contradicen !!!!
CEOFA es señalada por el SAS como "culpable" de que los pacientes puedan, eventualmente, pagar algunos medicamentos... Sin embargo, la realidad es que el señalado es el SAS, por incumplir la ley de una forma manifiesta, a tenor de que son dos Tribunales los que así lo sentencian. La ley ha de cumplirse, de lo contrario cundirá la arbitrariedad y el desorden. No cabe invocar el síndrome de Robin Hood...