Hace unos días se publicó el Barómetro Sanitario 2016 que pretende ser una radiografía del sistema sanitario y la visión que tienen los usuarios del mismo. Entre sus preguntas, se intentó abordar el abuso y mal uso de los antibióticos, así como las situaciones en las que los pacientes acceden a los mismos.
Las principales conclusiones fueron que el 13,8% de los entrevistados ha tomado antibióticos en las últimas dos semanas. De ellos, el 89,5% fue a consecuencia de una receta médica, mientras que el 4,9% lo adquirió en una farmacia sin receta. La mayor parte de ellos obtuvieron un consejo profesional (más del 93%) y también completaron el tratamiento un 92%.
Estas cifras no tendrían nada de extraño si no nos paráramos a analizarlas un poco más allá.
Si el 13,8% de los entrevistados han tomado un antibiótico, supone que en los últimos quince días 6,4 millones de personas han estado en tratamiento con un antimicrobiano. Es decir, que al mes serían 12,8 millones de personas y al cabo de un año estaríamos hablando de unos 160 millones de personas. Es decir, 160 millones de tratamientos, al menos, puesto que aunque la mayor parte de ellos se podrían terminar con un único envase de producto, hay algunos que requerirían dos.
Por otro lado, el 89,5% de esos 160 millones de tratamientos se habrían iniciado a partir de una receta médica, es decir, 136 millones de prescripciones al año en antibióticos.
Todos estos cálculos estarían, no obstante, infravalorando la realidad ya que no tiene en cuenta que unos grandes consumidores de antibióticos, como son los niños menores de dos o tres años, no han participado en la encuesta y, por tanto, su efecto no está recogido en la misma.
A la vista de estos datos, y antes de soltar la voz de alarma, cabe preguntarse si hay posibilidad de que los resultados obtenido no sean realistas. Situación que, no obstante, no elimina la sobreutilización de estos medicamentos
Las farmacias facturaron el año pasado un total de 901,6 millones de envases al Sistema Nacional de Salud. De ser cierto lo recogido en el barómetro, al menos, el 17,7% de los envases consumidos serían antibióticos. Nos lo podríamos creer o no, pero la respuesta nos la da QuintilesIMS ya que, según sus datos, el número de envases dispensados del grupo ATC J01 a lo largo de 2016 fue de 46 millones, es decir, casi la cuarta parte de lo declarado, teniendo en cuenta además que como hemos dicho, puede haber pacientes que requieran más de un envase para un único proceso. Una divergencia bastante importante.
Pero más allá. Según el último Informe del Sistema Nacional de Salud 2015, el número total de consultas médicas de atención primaria alcanzó los 250 millones en todo el año. De este modo, si los entrevistados dicen la verdad y la mayoría, es decir, 136 millones de tratamientos, se hubieran iniciado a partir de una receta médica, resulta que el 54,4% de las consultas médicas que se produjeron en 2016 habrían sido a consecuencia de un proceso infeccioso que hubiera requerido de la prescripción de un antibiótico. No parece que sea algo factible.
A la vista de estos datos parece claro que los resultados del Barómetro Sanitario no pueden ser reales y que las respuestas de los entrevistados no serían veraces bien de forma voluntaria o involuntaria.
Desconocimiento de la población
Como no parece lógico que alguien mienta acerca de si ha ido o no al médico en las últimas dos semanas, parece más probable que los entrevistados no tengan claro qué es un antibiótico y confundan a los antimicrobianos con cualquier otro tipo de medicamento. No sería de extrañar puesto que muchas personas no conocen (ni tienen porqué conocer) los distintos tipos de medicamentos y sus indicaciones.
Esta afirmación se podría sustentar al analizar las respuestas de los entrevistados según su nivel de estudios. Según se incrementa el nivel, el porcentaje de entrevistados que afirman haber tomado antibióticos en las últimas dos semanas disminuye de forma importante y de forma paralela al nivel de estudios desde el 19,9% de las personas sin estudios al 9,9% de las que tienen formación superior.
Cabe señalar que la pregunta sobre antibióticos se añadió al Barómetro Sanitario en la edición de 2015 y, en esa ocasión, el porcentaje de entrevistados que afirmaron haber consumido estos productos en las dos últimas semanas era incluso superior a la edición actual: un 14,4%.
Nicolas Gonzalez Casares: