La cúrcuma es una especie de origen hindú. Se obtiene de la raíz de una planta perteneciente a la familia de las zingiberáceas, y es conocida científicamente con el nombre de Cúrcuma longa.
La cúrcuma es de color naranja con un potente olor y sabor, es una de las especies más utilizadas en la gastronomía hindú, siendo uno de los principales constituyentes del popular curry.
Según la farmacopea europea la parte medicinal que se utiliza es la raíz o rizoma entero tratado por ebullición o vapor y posteriormente desecado. En cuanto a su composición hay que decir que los efectos farmacológicos demostrados se deben a la presencia de los curcuminoides, principalmente curcumina, así como, también a los aceites esenciales y ácido cafeico. La Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) aprueba su uso tradicional para incrementar la secreción biliar, en el tratamiento de la indigestión, como puede ser sensación de plenitud, flatulencia, así como digestiones lentas.
No obstante, y desde hace años, los preparados de cúrcuma enriquecidos en curcumina se vienen utilizando también por su efecto antiinflamatorio. De hecho, en la actualidad estas propiedades antiinflamatorias son las que más se están estudiando como un remedio natural, a considerar en casos de afecciones articulares y musculares.
Vistas las acciones de uso de la cúrcuma pasamos a decir cómo la podemos ingerir. Se puede tomar en infusión, y también en cápsulas en forma de preparados farmacéuticos, que nos garantizan la dosis adecuada de principio activo. Se debe tener en cuenta que, la Agencia Europea del Medicamento establece una determinada posología para el uso de la cúrcuma por vía oral en adultos. ya sea en polvo en infusión o en extracto seco.
Recuerda, pregunta siempre a tu farmacéutico de confianza en plantas medicinales. Te aconsejamos y resolveremos cualquier duda que tengas.
Recuerda, ante cualquier duda acude a tu farmacia y consulta a tu farmacéutico.
Nicolas Gonzalez Casares: