La hasta hace unas horas ministra Política Territorial y Función Pública, Carolina Darias será finalmente la nueva ministra de Sanidad, en sustitución de Salvador Illa. Así lo ha anunciado Pedro Sánchez esta misma tarde al anunciar su primera remodelación de Gobierno que se ha saldado con cambios mínimos.
Con la llegada de Darias a Sanidad se cumplen los pronósticos previstos sobre el baile de sillas que se puso en marcha a principios de mes con el anuncio de la marcha del ministro Illa a encabezar el cartel socialista en las elecciones catalanas. Pedro Sánchez ha solucionado con cambios mínimos su primera remodelación del Consejo de Ministros no impuesta, como fueron los casos de Carmen Montón también en Sanidad y Maxim Huerta en Cultura.
Darias, habitual ya en las reuniones del Consejo Interterritorial del SNS, ocupa la cartera sanitaria y el hueco que deja libre en Política Territorial, es cubierto por Miquel Iceta, el líder de los socialistas catalanes, que se convierte en el nuevo ministro del ramo, tras ceder a Illa la cabecera en la lista catalana.
En comparecencia ante los medios para anunciar los cambios, Sánchez indicó que ya ha comunicado al Rey los cambios en el Ejecutivo. Tanto Iceta como Darias, juran el cargo el miércoles en La Zarzuela.
El jefe del Ejecutivo ha destacado que los dos conocen "muy bien" los ámbitos en los que desarrollarán su tarea. "Les avala su experiencia y sus cualidades". De Darias ha comentado que ha acompañado a Illa en el "día a día" de la pandemia, tanto en el Consejo Interterritorial de Salud como en las comisiones internas del propio Gobierno. Conoce, ha señalado, a los consejeros de Sanidad de las comunidades y a los presidentes autonómicos.
La nueva responsables de Sanidad asume la cartera en plena escalada de contagios por coronavirus, en una tercera ola mortal, e Iceta, como cuota catalana del Gobierno, la interlocución territorial. Dos nombramientos relevantes en una legislatura marcada precisamente por los asuntos que competen a sus áreas: la crisis sanitaria y la propuesta de una mesa de negociación con los independentistas catalanes.
La nueva ministra ha indicado que asume el cargo “con mucha ilusión, responsabilidad y humildad”. Darias ha hecho esta valoración a través de las redes sociales donde también ha expresado su reconocimiento al trabajo de Salvador Illa.
Por su parte, también a través de las redes sociales, diversos sindicatos sanitarios y colectivos profesionales han pedido a Darias que sea capaz de liderar una respuesta coordinada ante la pandemia. Igualmente, se le ha advertido desde la profesión sanitaria que la situación no está para “ofrecer 100 días de cortesía”.
No obstante el primer reto de la nueva ministra vendrá desde el ámbito político, donde el viernes le espera la Comisión de Sanidad del Congreso, ante la que tendrá que rendir cuentas y explicar cuales son su planes en relación a la grave evolución de la pandemia
Darias es Licenciada en Derecho por la Universidad de La Laguna, pertenece al Cuerpo de Administradores Generales de la Administración Pública de la comunidad autónoma de Canarias. Miembro del PSOE canario, ha sido concejal del Ayujntamiento de Las Palmas , subdelegada del Gobierno en Las Palmas y diputada del Parlamento canario donde ocupó la portavocía de la Comisión de Sanidad.
Posteriormente fue directora de Gobierno de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Vivienda del ayuntamiento de Las Palmas y de 2008 a abril de 2011, delegada del Gobierno en Canarias, cargo al que renunció para presentarse a las elecciones autonómicas de 2011 como candidata a la Presidencia del Cabildo de Gran Canaria. Fue portavoz del grupo del PSC-PSOE en el Cabildo de Gran Canaria, y vocal de la Ejecutiva Federal del PSOE.
“No me arrepiento”
Salvador Illa deja el Ministerio de Sanidad asegurando que “no” se arrepiente de sus decisión y que deja su responsabilidad “en el momento que lo tengo que hacer como lo anuncié en su día”.
En su última intervención en el Consejo de Ministros, Salvador Illa ha tenido ocasión de despedirse y de ser reconocido por la portavoz, María Jesús Montero como un "servidor público" que estará siempre donde pueda ser "más útil".
En este contexto, ha considerado que su lugar ahora es la candidatura socialista a la Generalitat, a pesar de que, como en Sanidad, sabe que el futuro probablemente no le deparará un destino "cómodo".
También ha tenido tiempo en esa comparecencia para hacer una valoración de su papel a lo largo de este año en el que ha ocupado la cartera de sanidad. Illa, reconoce “que hemos cometido errores”, pero “también algún acierto”, aunque ha evitado hacer referencia a ningún hito concreto.
“El momento más duro" de la pandemia, ha indicado, fue cuando tuvo que proponer al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, restricciones que impidieron que las familias pudieran acompañar a los seres queridos que morían por la Covid. Illa ha dado las gracias a todos los profesionales sanitarios, desde "médicos y especialistas" hasta "celadores y personas de labores de limpieza" y ha subrayado su "vocación y profesionalidad en esta pandemia terrible".
Además, se ha dirigido a la ciudadanía española que ha padecido "medidas muy duras que han alterado la vida cotidiana" y ha agradecido el cumplimiento "ejemplar" de una "forma muy mayoritaria".
Ha asegurado, además, su “respeto y máximo reconocimiento”, tanto a las entidades que han cuestionado su labor en el Ministerio, como hacia el Congreso de los Diputados, donde el pasado lunes se ganó las críticas de todo el arco parlamentario, salvo el PSOE, por su marcha antes de la comparecencia que tenía prevista para el jueves.
Críticas
Las críticas a la gestión de Illa se han manifestado desde varios sectores, especialmente desde el ámbito territorial. La falta de una respuesta a la ampliación que pedía la mayoría de las Comunidades Autónomas de las medidas restrictivas, a o al momento de altísima incidencia que está viviendo el país ha sido criticado desde muchos territorios.
En Cataluña, su destino electoral, Illa ha sido calificado como “el peor ministro de la democracia”, mientras que en otras comunidades como Andalucía o Madrid, le han reprochado que se va “en el peor momento”, y han cuestionado si la prioridad del Gobierno de España es lograr un frente coordinado contra el Covid o conseguir el mejor resultado electoral para el PSC en los comicios catalanes.
En el sector sanitario se ha reprochado desde diversas entidades su falta de conocimiento sanitarios y su error por no dejarse asesorar por expertos sanitarios. Aunque se reconoce su carácter dialogante se le reconoce “un liderazgo político” y una falta de liderazgo real a la hora de contar con los profesionales.
Nicolas Gonzalez Casares: