Diverso expertos de sociedades científicas y Administración han demandado han demandado este miércoles no banalizar la gripe, puesto que según han explicado “pueden originar graves problemas de salud en las personas, especialmente en los mayores de 65 años y en las personas que sufre inmunodepresión”.
Así lo han asegurado durante una jornada llevada a cabo en Extremadura, precisamente con el objetivo de extender en la sociedad, la necesidad de tomarse en serio esta infección.
Ana Grande, vocal de la Junta Directiva de la Asociación Española de Vacunología ha explicado que la gripe “no es un simple virus que puede ser comparado a un catarro”, sino que puede generar graves problemas de salud. Grande ha recordado, “que sin haber pandemia”, la gripe, a nivel mundial mata a 650.000 personas al años. Igualmente, según los datos publicados por el Ministerio de Sanidad, en 2021 hasta 619.000 personas en España acudieron a las consultas de Atención Primaria por causa de este virus, registrándose 27.700 ingresos hospitalarios por esta razón; 1.800 en Unidades de Cuidados Intensivos y 3.900 muertes asociadas.
La experta de la AEV ha instado a que “si tenemos unas vacunas con una efectividad elevada, tenemos que usarlas, ya que estar vacunados hará que tengamos una evolución mejor”. Grande ha recordado que, además la vacunación de la gripe se asocia también con un riesgo un 34% menor de padecer eventos cardiovasculares graves.
Por su parte, Pilar Guijarro, directora general de Salud Pública de la Junta de Extremadura ha indicado que “el nivel de vacunación en nuestra comunidad es mejorable” y ha recordado que hasta el momento, el 50% de los casos graves registrados se corresponden con personas que no están vacunadas.
José Martínez Olmos, ex secretario general de Sanidad y ex portavoz de la Comisión de Sanidad del Congreso ha manifestado que si bien la opinión de la ciudadanía “es muy importante para lo que pueda suceder en relación con las estrategias comunitarias, las opinión de los profesionales sanitarios lo es aún más”.
Por ello, finalmente ha reclamado la necesidad de “hacer un trabajo más específico con los sanitarios y conviene conocer qué variables explican el comportamiento a favor o en contra de la vacunación”.
Nicolas Gonzalez Casares: